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Ediciones Sueños... imágenes en la niebla

Mentiras

Mentiras

En el mundo en que vivimos es casi normal manejarse con mentiras. A veces son mentiras piadosas o blancas para evitar el sufrimiento de alguien a quien amamos, pero son las menos, aunque a la larga igual hacen daño.

El resto de las mentiras son mentiras a secas, ésas que se dicen para tapar alguna maldad (en cualquier grado, desde la travesura a la hecha con alevosía y premeditación), para escapar a un castigo, para ocultar una verdad terrible.

En mi vida me he tropezado con cuatro mitómanos de tomo y lomo, más la gente que tiene la mentira como aliado de vez en cuando. Y les digo, he enfrentado a estos mitómanos y se niegan con todo. Hay uno que se me escapó, pero ya llegará el día en que le diré unas cuantas en su cara, porque mintió en un terreno que yo considero casi sagrado: la senda del guerrero (bushido y el código samurai). Esta persona lo rompió, lo pisoteó haciéndose pasar por quien no era y con eso arrastró a mucha gente.

Me molesta y me duele que sean así conmigo, simplemente porque yo no ando con mentiras por la vida, la gente puede ver en mí casi al instante mis sentimientos reflejados en mi cara, por lo tanto no puedo mentir. Pero cuando descubro que alguien me miente... hasta ahí nomás llegó la amistad. Y puchas que duele.

Ah, no entiendo. Ese gusto por lo malo, seguir la senda oscura y vivir metido en pura neblina. Sinceramente, no lo entiendo.

Cuando conozco a alguien, nunca se me pasa por la mente desconfiar... hasta haber tenido los primeros acercamientos conversando. Luego, ya me distancio cuando capto las malas vibras, pero siempre estoy observando, porque puede ser que el momento en que viva esa persona lo obligue a eso, y mientras no exista daño evidente, no puedo ser radical.

Pero bueno... mi naturaleza es blanca, por decirlo de alguna manera, y es difícil que yo rechace a alguien a la primera... pero ha habido casos y no me he equivocado.

Eso. Qué drástica, pero creo que a veces es lo mejor. Las mentiras sólo conducen a malos ratos o a peleas incontrolables. Así que a pensarlo antes de decir una.

Yamila
CHILE

3 comentarios

Héctor González Avilés ("Tito"). -

Las mentiras son naturales en los seres humanos, amiga Yamila, pero hay que tomar en cuenta, que las mentiras hieren a Cristo.

Mejor obrar con absoluta sinceridad con los demás
y hacer de este mundo en crisis,
un mundo mejor.

Yamila -

¡Excelente comentario, Smellwing!
Toda la razón. Si te mienten, ¿puedes confiar en cuando te dijeron que querían ser tu amig/a?

Qué doloroso, pero bueno, qué se le va a hacer. Mientras uno permanezca limpio, el resto que viva en la mugre que formó por sus mentiras.

SmellWing -

Pues si, aunque a mi me carga mentir pq no me siento cómodo. Las mentiras, sobre todo las grandes, siempre dañan. Sobre todo del que uno cosideraba un amigo...porque te hace pensar ¿Me habrá dicho la verdad cuando me aceptó como amigo?