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Ediciones Sueños... imágenes en la niebla

Aprendiendo a vivir (re-publicación)

(Como el anterior, problemas de servidor, se borró gran parte de febrero)

Cuando una llega a una edad como la mía (los 30, shhuuu, qué vieja, jajajaja), suele pensar mucho las cosas. Puede que en un momento duelan, molesten, den rabia y un largo etc., pero luego el raciocinio se impone y terminas viendo las cosas fríamente, sin sentimentalismos.

Hay cosas que pasan y ya no afectan, o por lo menos afectan tan poco que pasan al olvido en cortísimo tiempo, onda unos minutos y chao.

Hay otras que aunque queden dando vueltas un rato, después se olvidan, cosas que antes eran todo un drama, como por ejemplo que alguien que te dice "no te quiero", y tú pensabas lo contrario. Al final, luego del plop inicial, es mejor no insistir y dejar a esa persona con su pared insondable a los sentimientos que alguna vez le ofreciste (fueran de amor,amistad, admiración, etc). Es mejor cumplirle el deseo a esa persona y no pescarla más.

O también que tratas de salvar una amistad, pero al final te das cuenta que es imposible, porque la persona que querías conservar como amiga se aleja y se aleja y se aleja. Lo mejor es no insistir, porque quien sale perdiendo es una no más.

También hay otras situaciones en que ves las respuestas a las preguntas que te hacías, como por ejemplo qué camino tomar en tal o caso. Y ésas señales son inolvidables e infalibles, porque si les haces caso te ahorras un montón de problemas por tratar de ir contra la corriente. Por ejemplo, supe de antemano (tengo mis momentos de clarividencia, jajaja, por llamarlo de alguna forma) que cierta persona me iba a jugar chueco... aún así, le di el beneficio de la duda, pero mi presentimiento resultó real. Me jugó chueco. Hoy esa persona ha sido borrada de mi vida por completo.

¿Qué más? Ah, cuando te das cuenta que alguien te sacó de su vida, sea familiar, amigo, estimado, conocido. Es un alivio cuando logras romper la cadena que te hacía tener las mayores consideraciones con esas personas.

Y así, suma y sigue. Al final, sabes que sólo cuentas contigo y con un puñado de personas cercanas que te han demostrado que no te jugarán chueco, con las que puedes contar y a las que apoyarás, ayudarás y querrás aunque el mundo se venga abajo. Y es por ellas que vale la pena seguir y compartir todo lo que una/o se propone, sus proyectos, deseos, hechos, logros, penas, fracasos, alegrías, secretos, vivencias, todo.

A esas personas cercanas, muchas gracias y l@s quiero de tod@ corazón!!!!

Yamila

3 comentarios

Gregorio Verdugo -

Ya me gustaría a mí volver a tener los 30 otra vez y, a ser posible, con la sensatez y equilibrio con que los llevas tú.
Saludos

Aviva -

Ay, amiga, la "barrera de los 30"...
La verdad no me dí mucha cuenta cuando paso: estaba super ocupada. Y hoy, a los 37, como que recién caché.
Igual, sigo ocupada, con el trabajo y esas cosas.
Y al aprecer no va a parar.
Lo bueno es que el tiempo te da perspectiva y efectivamente uno ya no ve como un drama chino lo que le pasa, sino que con altura de miras. Es el momento en que tienes que decir: ¿esto es lo que me hace feliz? ¿esto quiero? Y al final llegas a la conclusión de que ya no estpas en edad para ciertas cosas. NO porque sea infantil, sino porque ya no deben ser cosas que te preocupen.
Hay tan poca getne en el mundo que vale la pena, que al final, debes estar con la poca gente que te conoce y, como dice el dicho, a pesar de defectos varios, aún nos quieren.
Un abrazo!

anaccapote -

ay ay ay ay te entiedno pero bueno te diré que yo tengo 34 y si, cuando crucé los 30 fue muy muy curcial para mi, siento que el tiemp opasa demasiado deprisa, y NO me gusta un pelo¡¡¡ pero es asi... de todas formas me sineto mejor que con lso 28 que estaba con el trauma que cruzaba pronto frontera,... ahroa ya cruzada por 4 años... asumido feliz y adelante¡¡¡¡